sábado, 5 de enero de 2013

Sí pero no, bueno no sé



  Miradas perdidas en el mar de cientos de amargos recueros, que son tus ojos; acuosos pozos, tendentes a la sequía, no por falta de ganas, sino de fuerzas, que riegan cristalinos deseos de amor, ¡qué digo!, de cariño que es más barato y ensucia menos.

  En el fondo no quieres nada que yo no quiera; pero ansias algo que no puedo darte. ¿Complicado? ¡qué va!, en tal caso algo rebuscado, porque todo esto no son más que maniobras de estratega para guardar bajo llave eso que tú quieres y no quiero darte; porque me da miedo; porque me horroriza el dolor de perderte aun y cuando nunca te he tenido; y lo peor es que es porque yo no he querido darte la combinación de la caja que escondo bajo mi cama; y que convive con el polvo que deja tu ausencia a mi lado.




No hay comentarios:

Publicar un comentario