domingo, 30 de diciembre de 2012

universos finitos y acabados

Ya no escribo ni sueño contigo, porque he perdido mi pluma, igual está en el universo recóndito al que van los sueños inconclusos.

Me miro en el espejo y sonrío, aunque él solo me devuelve trozos de un espectro yo sé que sonrío y por ahora eso es suficiente, tiene que serlo.

Me pierdo en el bosque que son tus piernas, incluso cuando no me has invitado, sobre todo cuando no me quieres cerca.

Tus ojos me dan calambre, pero eso siempre me ha gustado, aunque ya da todo igual, porque Dios se fue, lo mataron las sombras de los hombres que hoy pueblan el mundo y que se alimentan los unos de los otros.

Oriente ya no nos quiere, ni lo hace Occidente, bajémonos al fondo del océano, tierra de nuevas oportunidades y de llaves perdidas.

Matemos nuevas civilizaciones, porque las viejas ya nos aburren, y soñemos peces de colores mientras morimos al acostumbrarnos a vivir sin aire.


viernes, 21 de diciembre de 2012

Miedo al miedo

Solo los muy imbéciles o los locos, pueden permitirse el lujo de no temer a nada, el miedo es el arma que tiene la vida para impedir que nos hagamos demasiado fuertes, para controlar nuestra soberbia, es necesario para ser prudentes, pero es más necesario para enfrentarlo y superarlo, porque cuando haces esto, aparece una sensación de poder que te llena inmensamente. Aunque no salga todo bien, de cualquier situación en la que enfrentemos nuestros temores salimos un poco más fuertes.